48 horas en Colombo

La capital de Sri Lanka suele ser la puerta de entrada, pero merece estirar la jornada un par de días.
48 horas en Colombo capital de Sri Lanka.
Getty

Si viajas a Sri Lanka, en algún momento y en el lugar más insospechado, surgirá una serendipia. Esta palabra derivada del cuento tradicional persa “Los tres príncipes de Serendip” y antiguo nombre de Ceilán viene a ser “un hallazgo afortunado”, o ese descubrimiento inesperado que nos sorprende entre palmeras y lagos tapizados de lotos. Y lo cierto es que una de esas serendipias ya te sorprende al aterrizar en Colombo, umbral de cualquier viaje a Sri Lanka el cual solemos limitar a unas pocas horas antes de sumergirnos en el Triángulo Cultural, las plantaciones de té y los mares de cocoteros que se despliegan por toda la costa.

¿Nuestro consejo? Quédate un poco más en este antiguo “puerto de mangos fragante”, un oasis donde coexisten las influencias europeas, el encanto local de Sri Lanka y un circuito de arte, mercados y gastronomía fascinante. Concretamente, pasa 48 horas en Colombo.

DÍA 1

9:00h: Tras desayunar en el hotel –atención al coqueto Tintagel–, nos disponemos a visitar el centro de Colombo, una amalgama de influencias que te atrapa y no te suelta. Mientras la Lotus Tower, icono de cuestionable belleza estética –y cuyo mirador también puedes visitar–, se dibuja en el horizonte en todo momento, nos acercamos al Sri Kailawasanatan Swami, el templo hindú más antiguo de Colombo y dedicado a los dioses Shiva y Ganesh.

A partir de aquí podemos acceder a Fort Colombo, el distrito cultural y económico de la ciudad donde descubrir algunos de sus grandes iconos: desde el Palacio Presidencial hasta Lloyd’s Building, un elegante edificio colonial británico inaugurado en 1908, Old Dutch Hospital, el cual acoge un centro comercial, o el faro de Galle.

Colombo es más que una puerta de entrada.Alberto Piernas

12:00h: Si te pierdes, el bullicio te guiará hasta Pettah. El barrio árabe de Colombo es también el pulmón comercial de la ciudad y un mandala de puestecitos donde se vende casi de todo en torno al gran icono de la zona: Jami Ul-Alfar, también conocida como Mezquita Roja, todo un alarde de color y geometría construido en 1909 por la comunidad musulmana.

Si te sobra tiempo, puedes acercarte al lago Beira, donde se despliega el mercado flotante de Pettah, una perfecta opción para disfrutar de la comida callejera de Sri Lanka, como su rico kottu –trozos de pan roti troceados y cocinados con verduras– o un rice&curry sublime.

Mezquita roja de Pettah.Bryan Kyed vía Unsplash

16:00h: Por la tarde podemos deleitarnos con los lugares más verdes de Colombo. Jardines donde la cultura budista se entrelaza con lagos de lotos vigilados por el skyline de la ciudad.

El parque Viharamahadevi es un buen ejemplo, bautizado así en honor al rey homónimo y gran espacio verde donde encontraréis un acuario y una estatua de Buda. Gautama es también protagonista del Gangaramaya Temple, un espacio religioso concebido como una isla y conectado a tierra a través de un puente de madera. Este lugar es ideal para admirar con discreción las oraciones y ofrendas a Buda, además de dar un relajante paseo junto al agua.

18:30h: El océano Índico siempre tuvo gran influencia en la vida portuaria de Colombo, y Galle Face Green es el mejor atajo para sumergirse en diversas épocas. Este paseo marítimo abandonó hace años su antigua función militar para convertirse en unos de los principales puntos de encuentro de la ciudad: cafeterías y tiendas coexisten con espectáculos callejeros, partidos de críquet y el mar como compañero en todo momento. Además, es el lugar perfecto para sucumbir al atardecer.

Estatuas de Buda en el templo Gangaramaya.Alamy

21h:00h: Hablar de Colombo y gastronomía supone hacerlo de Ministry of Crab, el bastión del reputado chef Darshan Munidasa –mentor a su vez del restaurante japonés Nihonbashi, también en Colombo –y alojado en Old Dutch Hospital. Un paraíso foodie donde el cangrejo se elabora a través de tantas recetas como formas de degustarlo. Incluido en Asia’s 50 Best Restaurants 2022, Ministry of Crab evoca un conjunto de platos en los que este crustáceo siempre es el protagonista, desde su Garlic Chilli Crab hasta su Butter Crab, plato que requiere de 6 horas de aviso previo.

DÍA 2

09:00h: En este segundo día de nuestro 48 horas en Colombo, nos alejamos del centro, incluso fuera de la ciudad. El día comienza en Cinnamon Gardens, uno de los barrios más cool de Colombo, ideal para desayunar en uno de sus muchas cafeterías –por ejemplo, en Seed Café– o pasear por las calles que reinventan esta antigua área poblada de plantaciones de canela en el siglo XVIII.

Además, en Cinnamon Gardens podemos desde descubrir galerías vanguardistas en Saskia Fernando Gallery o perdernos por boutiques como Upali’s by Nawaloka o Lakpahana Handcraft, lugar donde los artesanos ceilandeses venden sus creaciones desde hace más de 40 años.

Lotus Tower y skyline de Colombo.Jalitha Hewage vía Unsplash

12h: Tras un desayuno fuerte (o un brunch), podemos elegir entre dos opciones, ambas ubicadas fuera del centro de la ciudad. La primera opción es Dehiwala-Mount Lavinia, un barrio famoso por sus espacios artísticos, su playa homónima, el jardín zoológico inaugurado en 1936, el templo budista de Bellanwila Rajamaha Viharaya, o la residencia del gobernador ceilandés, construida en el siglo XIX y reinventada como el hotel Mount Lavinia.

La segunda opción (muy recomendable si reserváis Colombo para el último día antes de tomar el vuelo de regreso) la encontramos en Negombo. Situado a 37 km de Colombo, este microuniverso acuático de palmeras al viento y barcas de colores fue en su época un fructífero territorio de plantaciones de canela además de puerto estratégico para los portugueses y holandeses que construyeron aquí una fortaleza. En Negombo, los mejores planes invitan a perderse por la playa del mismo nombre, asomarse al pintoresco Hamilton Canal (o Canal Holandés), pasear por sus mercados de pescado o degustar una rica langosta frente a un horizonte salpicado por las velas de la típica embarcación Oruwa.

Ver fotos: 25 países que todo viajero debería visitar (al menos) una vez

19:00h: Buen vuelo si regresas al cercano aeropuerto, o mejor continuación si vuelves a Colombo y llegas a tiempo para contemplar el atardecer en el ON14 Rooftop Bar & Lounge del Radisson Hotel Colombo. Un último suspiro frente a un océano Índico que acaricia la orilla, entona una antigua canción de marineros entre los vestigios de la historia y nos envuelve mientras repasamos 48 horas de serendipias en la infravalorada capital de Sri Lanka.

Ver más artículos

SUSCRÍBETE AQUÍ a nuestra newsletter y recibe todas las novedades de Condé Nast Traveler #YoSoyTraveler