‘Reina Roja’: un Madrid de cielo azul y subsuelos oscuros

El ‘best seller’ de Juan Gómez-Jurado se convierte en una trepidante serie protagonizada por Vicky Luengo, Hovik Keuchkerian y la ciudad de Madrid.
‘Reina Roja un Madrid de cielo azul y subsuelos oscuros
Andre Paduano (Prime Video)

Más de tres millones de lectores, fans activos de la saga literaria, justificaban que las novelas de Juan Gómez-Jurado llegaran de una forma u otra a la pantalla. Reina Roja (estreno en Prime Video el 29 de febrero) es una serie de siete episodios que trasladan el ritmo y enganche de las páginas y mantienen su inconfundible espíritu madrileño.

“Una de las premisas de la serie es que sucede en Madrid”, dice honestamente su creadora, o showrunner, Amaya Muruzabal. “Yo había leído la obra de Juan, que casi siempre había sido un autor que situaba la mayor parte de sus novelas fuera de España o en contextos culturales distintos y creo que una de las cosas que sucedió en Reina Roja es que, de pronto, vimos que un thriller page turner divertido, que no puedes parar de leer, está situado en Madrid. Ese juego del reconocimiento de los espacios, de las marcas y de una serie de iconos culturales era fundamental para entender el vínculo entre thriller y espacio”.

Madrid bajo el cielo azul…

Andre Paduano (Prime Video)

Según Muruzabal, parte del éxito de la novela es ese reconocimiento de los lugares que menciona, ese sentirse identificado en una ciudad que conocemos. “Y no desde el miedo de me puede pasar a mí, sino desde el disfrute porque he pasado por esa esquina, porque sé perfectamente de qué bar está hablando… Es decir, es un libro súper madrileño, tiene como esa vidilla canalla”. Y, por eso, era una de las premisas a la hora de trasladarlo a la pantalla: “Madrid se tiene que sentir como lo sentimos los madrileños –aunque yo soy madrileña adoptiva–“, admite.

MADRID MÍTICO

En los siete episodios que componen la primera temporada de Reina Roja, se ven lugares muy conocidos de la ciudad, otros menos, se reivindican algunos, se descubren otros. “Intentábamos conseguir el efecto Nueva York, ese que, cuando vas por primera vez a Nueva York, piensas si yo ya la conozco, ya ha estado aquí y es gracias al cine, ¿no?”, explica Muruzabal. De ahí, esos lugares míticos, icónicos, quizá hoy considerados demasiado turísticos, pero que la serie quiere reconquistar como madrileños para los madrileños.

Hablamos de la Chocolatería San Ginés, donde Jon (Hovik Keuchkerian) se come unos churros con chocolate, claro. “San Ginés nos parece como el blasón de las chocolaterías de Madrid, aunque haya muchas más, pero estar ahí es nuestra forma de reivindicar el patrimonio intangible que son los churros con chocolate, algo súper madrileño”, dice la showrunner.

Churros y porras: patrimonio intangible.

Andre Paduano (Prime Video)

El Corral de la Morería es otro de esos templos madrileños que la serie quiere reivindicar. “Nos parece verdadero patrimonio cultural de Madrid, nos apetecía mucho invitar de nuevo a que los madrileños lo tomemos de nuevo”, explica.

Se ve también la fachada del Café Moderno, o el Palacio de Cristal del Retiro, la Plaza de Oriente, Ópera, las calles y casas “súper bonitas y decimonónicas” del Barrio de Salamanca y, por supuesto, se vive Lavapiés. Sus exteriores, la plaza donde está situada la casa de la protagonista Antonia Scott (Vicky Luengo), ese barrio que vivió Gómez-Jurado y que habita su superdotada y torturada investigadora.

Ver fotos: series que nos harán viajar en 2024

“Hemos buscado sobre lugares que todos podamos reconocer un poco, porque partíamos de la iniciativa de la novela, lugares que todos pudiéramos reconocer y que los hayamos disfrutado, pero con una intención cinematográfica”, continúa. Resignificarlos, darles una nueva vida desde el thriller.

En El Corral de la Morería.

Andre Paduano (Prime Video)

THRILLER ACHAMPANADO

“Reina Roja es un canto de amor absoluto a Madrid”, insiste Amaya, a quien no le gusta hablar de localizaciones sino de “espacios cinematográficos” porque no son meros escenarios de la trama, sino personajes y en sí mismos, que suman y dan más valor a la historia. En los que, además, se esconden muchos guiños al autor (como el restaurante Omeraki de Chicote) y a la relación del escritor con los fans de su novela, confirma Muruzabal.

“Esto es un thriller que sucede en Madrid bajo el cielo azul y sobre la ciudad horadada, esto era como el lema del equipo”, cuenta. La ciudad que vemos bajo el cielo azul es “mítica” (“Mi intención era mitologizar Madrid”, dice Muruzabal) y muy luminosa.

Lavapiés… desde arriba.

Andre Paduano (Prime Video)

“Nosotros lo llamábamos ‘thriller achampanado’, porque sí, están matando gente, pero casi te dan ganas de beberte una copa de champán porque te estás divirtiendo”, dice. Es un thriller hitchcockiano con referentes de cine clásico, muy obvios en esa relación entre Antonia y Jon. “Siempre nos acordamos de la escena de la avioneta en Con la muerte en los talones y pensábamos en Hovik, con su traje, corriendo delante de la avioneta… y bajo el cielo azul”.

Pero también está el Madrid horadado, el subsuelo oscuro. Han rodado en el Metro de Madrid, en sus túneles, donde ella y el director Koldo Serra han cumplido un sueño: homenajear una de sus escenas favoritas del cine español: los protagonistas de **Barrio, **de Fernando León de Aranoa, llegando al metro.

De eso, de intertextualidad cinematográfica, hay mucho. Como la vista de Gran Vía desde el Hotel Riu. “Queríamos rodar ahí sí o sí”, confirma y menciona la película Abre los ojos, de Amenábar. “Hay mucho homenaje a pelis españolas que amamos, hay mucha herencia y mucho gusto por el cine que nos ha gustado”. Y hay “espacios cinematográficos” en Reina Roja que pasarán a ser míticos. Seguro.