¿Por qué los aviones no tienen Wi-Fi gratuito aún?

Conectarse a 30 000 pies de altura es más complicado de lo que se piensa.
Nueva York desde un avión en pleno vuelo.
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Hubo un tiempo, no hace ni cinco años, en el que todavía se esperaba que todos pagáramos por el Wi-Fi, especialmente en hoteles y aeropuertos. Podías tener 20 minutos de servicio gratuito para empezar, o se te pedía que pusieras tus datos privados a través de Facebook para tener acceso. El Wi-Fi gratuito era un extra, un pequeño lujo. 

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Parece que esos tiempos han quedado atrás en todas partes… menos en los aviones. Volar es ahora una de las pocas ocasiones en las que nos vemos obligados a desconectar o a pagar un precio exorbitado por una señal a menudo malísima. ¿Por qué a estas alturas (valga la redundancia) los aviones no tienen Wi-Fi gratuito?

La primera explicación que se viene a la cabeza es sencilla: porque es una buena fuente de ingresos que los viajeros paguen por el servicio. Y es cierto, pero es solo uno de varios aspectos que explican por qué este avance no se ha extendido todavía a toda la industria. JetBlue comenzó a ofrecer Wi-Fi gratuito en sus vuelos en 2017, pero desde entonces ninguna de las grandes aerolíneas estadounidenses ha seguido sus pasos. Resulta que no es por falta de interés: muchas aerolíneas están en proceso de posibilitar la conexión gratuita de alta velocidad para todos los pasajeros en todos sus aviones.

Al no poder distraernos con nuestros móviles, los viajeros acabamos contemplando vistas como estas.

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YA HAY PROYECTOS EN MARCHA PARA IMPLEMENTAR WI-FI GRATUITO EN LOS AVIONES

El director general de Delta, Ed Bastian, prometió en 2018 que el Wi-Fi gratuito llegaría pronto a sus pasajeros, promesa que reafirmó en una entrevista de 2019 y en el CES en enero de 2020. La pandemia puede haberles hecho cambiar de prioridades, como es lógico. 

"Hemos recorrido un largo camino desde el CES 2020 y, aunque el Wi-Fi gratuito no se producirá de la noche a la mañana, seguimos comprometidos con ofrecer a los clientes la mejor de las experiencias", dijo Ekrem Dimbiloglu, director general de experiencia de marca de Delta, en un comunicado en la web de la compañía, que finalmente prometió que "la mayoría" de sus vuelos domésticos en Estados Unidos ofrecerían Wi-Fi gratuito a finales de 2022.

El resto de la industria está a la expectativa de lo que haga Delta, dice Gary Leff, experto en aviación que ha seguido la carrera por la instalación de Wi-Fi gratuito en los aviones e informado al respecto en su web View from the Wing: "A menos que Delta tarde demasiado y United adapte sus aviones antes. Pero no quedan ni cinco años para que sea una realidad", dice. "Llegará más pronto que tarde".

SI LA TECNOLOGÍA EXISTE, ¿POR QUÉ LOS AVIONES NO TIENEN WI-FI GRATUITO Y DE CALIDAD?

¿Por qué las aerolíneas no han implementado este cambio? Sencillamente, porque no es tan fácil: el proceso requiere una enorme inversión de tiempo y dinero para que estas compañías actualicen toda su flota y puedan ofrecer a los clientes una conexión de la misma calidad que la que disfrutan en tierra.

"Equipar un solo avión con Internet de alta velocidad ya puede tener un coste de millones de dólares", apunta Ryan Ewing, fundador del blog Airline Geeks. “No es en absoluto barato, eso hay que tenerlo claro. Es una cuestión de instalación de hardware, más que de pulsar un botón y decidir ‘ahora esto es gratis’”.

El Wi-Fi gratuito en los aviones será una realidad muy pronto, según expertos.

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"Algunos aviones pueden tener conexión a Internet instalada de fábrica, por lo que se podría ofrecer el servicio desde el minuto uno", dice un portavoz de Viasat, la compañía de Internet por satélite que se ofrece en la mayoría de las principales aerolíneas estadounidenses. "Otra opción que tiene la aerolínea es retirar un avión del servicio durante unos días para instalar el sistema de conectividad a bordo".

Para ofrecer Wi-Fi, los aviones necesitan una antena de satélite, un módem de red y varios puntos de acceso inalámbrico en su interior, según Jeff Sare, vicepresidente de soluciones de conectividad en vuelo de Panasonic Avionics Corporation. Y todo ese hardware requiere de mantenimiento, no solo de instalación.

¿CÓMO FUNCIONA UNA CONEXIÓN A INTERNET EN EL AIRE?

El funcionamiento de Internet sigue siendo un concepto misterioso, incluso (o especialmente) para los clientes que han crecido usándolo, pero Sare puede despejar las dudas: "Aunque se requiere una gran cantidad de tecnología e ingeniería para que todo funcione correctamente, en esencia, el avión funciona como un gigantesco punto de acceso móvil en movimiento", dice.

“Dentro del avión”, explica, "el portátil o la tableta se conectan al punto de acceso inalámbrico, o hotspot, mediante Wi-Fi, que a su vez utiliza el módem y la antena de la parte superior del avión para enviar y recibir señales de radio hacia y desde un satélite".

Es posible que en un futuro echemos de menos el momento de desconexión que suponía volar en avión sin Wi-Fi gratuito.

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Aparte del considerable esfuerzo que supone destinar todo ese tiempo y dinero, las aerolíneas reciben presiones para que la conexión que ofrezcan sea perfecta, ininterrumpida y presente en absolutamente todos los aviones de la flota, para evitar el enfado de los clientes más exigentes. 

En todo caso, obligar a la gente a pagar por el Wi-Fi tiene la función de desincentivar a la mayor parte de los viajeros, lo que permite a los clientes de pago obtener una mejor conectividad. En muchos aviones, "cuanta más gente intenta compartir el ancho de banda, menos hay para cada persona", dice Leff. "Cuando no hay mucho ancho de banda es cuando cobran mucho porque [están] intentando racionarlo". Es un poco irónico que cuanto peor sea el servicio, más cobren, pero también tiene sentido.

Aun así, la adaptación y el reequipamiento están en marcha, así que cuando los viajeros vuelvan en mayor número a surcar los cielos, tal vez en 2022, puede que por fin encuentren que su Wi-Fi es gratuito. Por supuesto, con ese cambio en la industria se acabó el desconectarse del correo electrónico del trabajo durante unas horas: tal vez deberíamos saborear los últimos momentos de paz antes de que se terminen.