Los mejores hoteles boutique de Palma
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La capital mallorquina está más viva que nunca gracias, en parte, al boom de los hoteles boutique, que hoy ocupan antiguos palacios en la zona antigua. Lo que hace varios siglos eran viviendas de familias nobles de Palma se han transformado hoy en templos del lujo exclusivo y discreto.
Gracias a esta apuesta, Palma está atrayendo a un tipo de turismo distinguido, que busca el lado más urbanita, artístico y gastronómico de la isla. Y vaya que si lo encuentra. El distrito histórico de la capital mallorquina es una mezcla perfecta de galerías de arte, restaurantes de renombre y un sinfín de aperturas que le hacen estar en constante ebullición.
No se nos ocurre mejor manera de descubrir cómo late el corazón de Palma que desde alguno de estos diez hoteles boutique. Aunque quizá debas planear varias escapadas a la capilar balear, porque lo difícil es quedarse solo con uno.
Hotel CortHotel Cort
En el kilómetro 0 de Palma encontramos uno de los emblemas de la ciudad y uno de los mejores lugares para disfrutar de la verdadera esencia palmesana: el Hotel Cort. Su terraza es un punto de encuentro de la vida mallorquina y frente al olivo centenario que ocupa la zona central de la plaza del ayuntamiento se suceden encuentros, conversaciones y confidencias.
Con el azul mediterráneo como seña de identidad, las 16 habitaciones del Cort están pensadas para replicar un hogar. Todas son diferentes y en todas el objetivo es hacer que el cliente se sienta como en casa. Pero, si tenemos que elegir una, nos quedamos con The Island Suite: un dúplex de 70 metros cuadrados con chimenea, bañera y una terraza privada con vistas a la plaza. ¿Se puede pedir más?
Can Alomar Urban Luxury RetreatCan Alomar
La casa señorial del siglo XIX que acoge hoy el hotel Can Alomar está junto al paseo más elegante de la ciudad: el paseo del Borne, una zona bautizada como la ‘milla de oro’ de Palma.
De estilo minimalista y sofisticado, algunas de sus 16 habitaciones ofrecen vistas al paseo y otras a un íntimo patio interior. Su azotea, exclusiva para clientes, es el lugar perfecto para mitigar el calor húmedo de los días de verano en un entorno tranquilo y con las mejores vistas.
Por si fuera poco, en Can Alomar encontramos el restaurante De Tokio a Lima, pionero en la cocina fusión y que ofrece una mezcla perfecta entre Japón, Perú y el Mediterráneo.
Hotel Can CeraCan Cera
Del mismo grupo que Can Alomar, It Mallorca, Can Cera es un pequeño paraíso oculto en uno de los palacetes con más solera e historia de la ciudad.
Entre muebles del siglo XVII y pinturas vanguardistas, es el refugio perfecto para terminar un día conociendo la ciudad de forma tranquila. Junto a la librería o en el rooftop; copa de vino en mano o con una degustación de quesos; el equipo de Can Cera ofrece muchas formas de sentirse como en casa (o mejor que en ella).
Y, además de descubrir las tradiciones mallorquinas, también te puedes animar a explorar el resto de la isla a bordo de Pardo 23, una embarcación privada para navegar con intimidad por las calas cristalinas de Mallorca.
Hotel CalatravaHotel Calatrava
Situado frente a la muralla árabe y con una entrada flanqueada por árboles centenarios, el Hotel Calatrava puede presumir de vistas al mar y a la imponente catedral de La Seu. Es más, su silueta forma parte de la fachada marítima de Palma.
Sus habitaciones, algunas de ellas suites tipo loft, prometen un descanso de reyes entre vigas de madera originales, tejidos locales y muebles de diseño.
Mención especial al spa, cuyos tratamientos se pueden disfrutar sin tener que pagar un extra, y al Calatrava-Gastro Gourmet, un surtido de productos mallorquines que el equipo del hotel ofrece a todos los huéspedes.
Concepció by NobisConcepció by Nobis
Diseño escandinavo y alma mallorquina. Concepció by Nobis es un ejemplo de lujo urbano pintado de color verde Tramuntana. Esa tonalidad es la protagonista de su interiorismo, incluyendo los azulejos de Huguet realizados a mano en Mallorca que encontrarás en sus 31 habitaciones.
¿Nuestro rincón favorito? El patio exterior con piscina, un refugio urbano entre tumbonas y limoneros en el que solamente escucharás las campanas de la iglesia vecina.
Para huéspedes y visitantes, en la planta baja está el restaurante Xalest, una propuesta de inspiración local firmada por el chef Xema Álvarez.
Hotel CappuccinoHotel Cappuccino
El primer hotel del Grupo Cappuccino no podía estar en otro lugar más que en Palma, cuna del emporio mallorquín. Con la firma de uno de los mejores interioristas del mundo, Jacques Grange, el Hotel Cappuccino ocupa un espacio privilegiado en la céntrica Plaza de Cort.
Las 32 habitaciones del hotel lucen un diseño atemporal y ecléctico, pero la vida del hotel gira, sobre todo, en torno al soleado patio central. A la propuesta hay que sumarle sala de cine (‘Cappucine’), spa, gimnasio, azotea con vistas al mar… todo para que ocurra la magia de conectar con la esencia más íntima de Palma.
Palacio Can MarquésPalacio Can Marqués
¿Por qué alojarte en un hotel si puedes alojarte en un palacio? Esta es la premisa de la que parte Palacio Can Marqués, un lujoso hotel que ocupa un palacio con 300 años de antigüedad en el barrio de La Lonja. Residencia de la familia Marqués durante décadas, es hoy uno de los alojamientos más imponentes y especiales de Palma.
A sus 13 suites, cada una con un estilo diferenciado, hay que sumarle una joya oculta: El Riad. Es la habitación de hotel (¿o más bien deberíamos llamarle palacete?) más grande de Mallorca, con casi 400m2 + 40m2 de terraza privada, con capacidad para 6 adultos y perfecta para largas estancias.
Hotel Sant FrancescHotel Sant Francesc
No hay duda de que una de las terrazas panorámicas más espectaculares de Palma está en lo alto del Hotel Sant Francesc. Pero su rooftop no es la única razón para escapar unos días a este refugio.
El patio mallorquín que verás junto al lobby es una de sus señas de identidad y también un punto de encuentro para visitantes y huéspedes. Su combinación exquisita de diseño, arquitectura y arte contemporáneo convierte al Sant Francesc en uno de los mejores rincones desde los que descubrir la ciudad.
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Convent La MissióConvent La Missió
Creado en el siglo XVII y dedicado a la formación de padres misioneros, este palacete acoge hoy el singular Hotel Convent La Missió. En sus 12 habitaciones y 15 suites predominan los colores cálidos y un diseño elegante que invita a relajarse y dejarse mimar.
Además, podrás disfrutar allí de la cocina de Marc Fosh, uno de los mejores chefs de la isla. También del espacio The Art Bar, un rincón de exposiciones perfecto para amantes del arte contemporáneo en el que compartir una copa al final del día.
Hotel PortixolHotel Portixol
Para terminar, nos damos un corto pero agradable paseo desde el centro histórico de Palma hasta la pequeña bahía de Portixol, donde encontramos el exclusivo hotel Portixol, uno de los primeros alojamientos boutique de la capital mallorquina.
Con su inconfundible fachada y ventanales azules, sus 25 habitaciones ofrecen vistas al puerto o vista directa al mar y una combinación exquisita de la sencillez escandinava con toques del Mediterráneo.El lugar es muy frecuentado por residentes y visitantes gracias a la fama de su restaurante, cuya propuesta gastronómica está en constante actualización.
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