Monterapia: el libro sobre los beneficios del montañismo

No hace falta ser un himalayista para obtener grandes beneficios psicológicos y físicos de la montaña. ¡Cuesta arriba se piensa mejor!
Mujer escribiendo en las montañas
Tyler Nix on Unsplash

Buena parte del éxito de Monterapia, el libro de Juanjo Garbizu que va ya por su undécima edición, radica en acercar la montaña al público general. Ya lo demuesta su poderoso arranque: “La montaña tiene mucho más en común con la vida de lo que crees. Suelo decir que un día en ella equivale a dos en la ciudad, por lo menos. Incluso una naranja o un bocadillo saben diferente".

En Monterapia: cuesta arriba se piensa mejor (Diëresis), el montañero reflexiona, a través de sus experiencias, acerca de cómo las cumbres nos pueden ofrecer muchas dosis de sabiduría sobre la amistad, la soledad, la confianza, las prisas, la tecnología…

“La montaña –alta o baja– me regala lecciones para mi vida personal”, explica el autor, que ha hablado con Condé Nast Traveler de su libro y de cómo estos valores que nos transmite la naturaleza están al alcance de nuestra mano.

CONDÉ NAST TRAVELER. ¿De dónde te viene la pasión por la montaña?

JUANJO GARBIZU. A los 17 años, unos compañeros del colegio me propusieron acompañarles un día en una de sus salidas dominicales por montes del País Vasco. Lo cierto es que me gustó y unos meses más tarde me dijeron de ir al Pirineo, concretamente a subir Monte Perdido. Y esa fue realmente la experiencia que me marcó, la primera vez que caminé en 1979 por el espectacular valle de Ordesa, para luego ir ascendiendo hasta los 3.000 metros, contemplando un extenso horizonte lleno de cumbres conforme ganaba altura.

Faja de las Flores, Valle de Ordesa.

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Con los años me acerqué a otras montañas en los Alpes, África, Andes e Himalaya. Cada valle, cada bosque, cada cumbre, cada paisaje, fueron alimentando mi pasión por la montaña, hasta hacerse tan necesaria como el respirar.

CNT. ¿Cuál es tu forma de vivir la montaña? ¿Tiene un enfoque psicológico?

J. G. El título de mi libro, Monterapia, ya lo dice todo, pues la montaña es para mí terapéutica, como un bálsamo para la mente. Más allá de los beneficios propios de realizar una actividad física, caminar por la naturaleza aporta muchos y variados beneficios a nuestro cerebro.

En países como Japón y Escocia, la sanidad pública receta Baños de Bosque a aquellas personas que sufren depresiones. Está científicamente demostrado que, por ejemplo, paseando por un hayedo se reduce el cortisol, que es la hormona previa a la depresión. Y mientras asciendes la montaña, se activa el hemisferio derecho de tu cerebro, potenciando de esta manera la intuición y la creatividad, tan necesarias en nuestras vidas.

Además, caminar por la montaña te ayuda de una forma sencilla, asequible y eficaz a tomar cierta distancia con los problemas más cotidianos. La sensación que uno tiene es que cuanto más alto subes todo lo que vas dejando abajo, en el valle, va adquiriendo otra perspectiva, llegando a relativizarse de forma importante.

Juanjo Garbizu, autor de ‘Monterapia’, el libro.

Cedida a Condé Nast Traveler

Vivo la montaña de una forma introspectiva y contemplativa. Por eso, aunque me gusta mucho hacer excursiones con amigos, también me encanta ir en completa soledad, disfrutando de esta manera de otros sentidos además de la vista, como el oído, el tacto y el olfato.

CNT. ¿Por qué decidiste escribir este libro?

J. G. Ascendiendo a una montaña, se me ocurrió escribir el libro, lo cual viene a corroborar el subtítulo del mismo: cuesta arriba se piensa mejor.

El día anterior había asistido a una conferencia impartida por Lotfi El-Ghandouri sobre creatividad y motivación, y mientras caminaba iba recordando momentos de la charla. De repente sentí la inspiración de que la montaña tiene muchas cosas en común con la vida cotidiana y conforme me acercaba a la cima iban surgiendo diferentes temas que configurarían posteriormente los capítulos de mi libro.

Sin intentar adoctrinar a nadie, mi intención era poder aconsejar a todas aquellas personas que se sienten atraídas por la naturaleza, pero que por el motivo que fuera no se habían iniciado en el mundo de la montaña, a que comenzaran a caminar por ella. Pero no desde un punto de vista técnico, como si fuese un manual o una guía, sino a través de la emoción, de las sensaciones y de una forma tranquila, relajada, sin miedo.

Portada del libro ‘Monterapia’.

Diëresis

CNT. ¿Qué encontraremos en sus páginas?

J. G. No es fácil contestar a esta pregunta, pues he visto el libro en algunas librerías en la sección de montaña, en otras en la de viajes y en otras, en la sección de psicología o de autoayuda. Y es que realmente Monterapia es un compendio de diferentes tipos de libros.

Por ejemplo, en él narro mis diferentes experiencias en cordilleras de todo el mundo y de cómo el mundo de la montaña se ha ido transformando a lo largo de los años. Pero también encontramos en sus páginas estudios científicos que vienen a avalar el poder terapéutico de la naturaleza, más allá de la fascinación que todos sentimos por su belleza. Pero todo ello, y esto es importante recalcarlo, en un lenguaje ameno e incluso, por momentos, divertido.

CNT. El libro ha sido un éxito, ¿a qué crees que se debe?

J. G. Por lo general, los libros de montaña suelen estar escritos por grandes alpinistas o himalayistas, siendo protagonistas en expediciones de gran altitud, la mayoría de ellas de gran riesgo y no siempre con final feliz. Este tipo de obras lógicamente captan la atención del lector, pero por lo general no se reconoce en ellas, pues suele ser un aficionado a la montaña que va al monte los fines de semana o aprovechando las vacaciones. Como yo mismo. Ahí creo que radica el éxito de mi libro, que está escrito por un montañero del montón, en el que se reconocen miles de lectores, de senderistas, de montañeros.

Mucha gente me ha dicho que mientras me leen, me perciben como un alter ego, pues muchas de las vivencias, sensaciones y experiencias que voy narrando las reconocen como propias. Como si alguien por fin hubiera escrito, poniendo negro sobre blanco, lo que ellos sienten y piensan. Por otra parte, se trata de un libro atemporal, siempre de actualidad, como lo demuestran sus 11 ediciones actuales.

Cabra Ibex en la Sierra de Gredos.

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CNT. ¿Para quién es tu libro? Y… ¿para quién es la montaña?

J. G. El libro está básicamente dirigido a cualquier amante de la naturaleza en general y de la montaña en particular. Mi sorpresa fue que, una vez publicado, también interesó a personas que nunca habían ido al monte, pero que les estimuló lo suficiente como para iniciarse en esta bonita actividad. También creía que, por lo que yo contaba en Monterapia, mi público se compondría de gente más bien veterana y cuál fue mi sorpresa al constatar que muchos jóvenes se interesaron por lo que yo escribía.

Respecto a para quién es la montaña, yo diría que es para cualquier persona que busca un entorno que le llene, sin importar su condición física. Porque mucho más allá de los beneficios inherentes a la práctica deportiva, la montaña nos ayuda a crecer como personas, potenciando muchas cualidades de nuestra mente, ayudándonos a relajarnos, a respirar, a sentir, a contemplar, en definitiva, a ser más felices.

CNT. Montes asequibles y montes amables, ¿qué beneficios ofrecen a los montañeros?

J. G. Yo no mido las montañas por su altura, sino por las satisfacciones que te proporcionan. En este sentido, los pequeños montes, asequibles y amables, son perfectos para iniciarse en el mundo de la montaña. Caminando por ellos vamos descubriendo senderos que cruzan bosques y valles, hasta alcanzar una pequeña cima y desde ella poder contemplar un precioso paisaje, mientras saboreas un bocadillo o un delicioso trozo de queso. Son experiencias intensas, reconfortantes, llenas de vida. Son momentos para disfrutar con los amigos, hablando de lo humano y lo divino, en un ambiente de total relajación, en el que el tiempo se detiene.

Senderistas en las montañas de los Alpes suizos.

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Este tipo de montes reúnen también las condiciones ideales para ir con niños y de esta manera ir inculcándoles el amor a la naturaleza, tan necesaria en nuestras vidas. Excursiones pequeñas al principio, para progresivamente ir ampliándolas, tanto en distancia como en desnivel. Porque, por mucha experiencia y muchas altas cimas que hayas hecho, con el paso de los años volverás a estos montes amables y asequibles, en los que uno es netamente feliz. Es fundamental no perder nunca el contacto con la naturaleza, por muchos años que uno tenga.

CNT. A ti, personalmente, ¿qué libros te han inspirado?

J. G. Paradójicamente a lo que se pudiera pensar, yo no soy un gran lector de libros de montaña, aunque me encanta leer. Pero hay dos títulos de ese género que me marcaron: El leopardo de las Nieves, de Peter Matthiessen, en el que el propio escritor junto con un zoólogo emprenden una expedición a la Montaña de Cristal, en la meseta del Tíbet, para poder avistar a este singular felino. Lo que comienza como una búsqueda del leopardo de las nieves, ese animal raro, venerado y emblema budista, se va transformando en una búsqueda del sentido del ser. Una soberbia combinación de montañismo y misticismo.

Ver fotos: ‘Mal de altura’ y otros títulos imprescindibles para entender la pasión montañera

Y Mal de altura, de Jon Krakauer. El escritor partió hacia el Himalaya en 1996 para escribir un reportaje sobre la creciente explotación comercial del Everest. Pero en un trepidante relato en el que la realidad supera la ficción, al poco tiempo de lograr hacer cima en la montaña más alta del mundo estalla una violenta tormenta. A partir de ese momento, se suceden una serie de acontecimientos que culminan con la muerte de 12 personas de su grupo.