Los destinos más pequeños del mundo

Hoy nos vamos de viaje por los destinos más pequeños que puedas imaginar. Hemos escrito sobre casi todo lo narrable en el mundo del viaje. Y lo que nos queda. Pero cierto es que nos dejamos llevar por lo que más nos impresiona, por lo magnánimo de la piscina más extensa del mundo, las escaleras más vertiginosas o la ciudad más poblada. Es muy atractivo elegir el resort con más piscinas, el spa con más chorros, el museo con más Picassos... O no. Si eres más amigo de las pequeñas reuniones, te gusta la intimidad y no sufres claustrofobia, en tus próximos viajes querrás disfrutar en estos lugares a pequeña escala.

EL PARQUE MÁS PEQUEÑO

Verde que te quiero verde (y diminuto). Parece mentira que en la lucha de “a ver quién tiene el pulmón urbano más grande del mundo” haya quien compita por tener el parque más pequeño. Y gana Portland, donde además de hipsters se encuentra Mill Ends Park. Y qué drama se creó cuando robaron EL árbol que cabe en esta macetita con grandilocuente título de 'parque'. Ahora los británicos contraatacan: su chiquiparque, Prince's Park en Burntwood, es más grande (caben un banco y tres árboles), pero ponen en duda que a Mill Ends Park se le pueda denominar 'parque'. Duelo de titanes o, más bien, de liliputienses.

AISLADOS EN LA ISLA MÁS PEQUEÑA

Ojo al dato: la isla más pequeña construida es una roca culminada por un faro. Tal cual. Un pequeño peñasco en el que cabe esta torre de 46 metros de alto y nada más. A 48 kilómetros de las costas inglesas, en el oeste más meridional se encuentra Bishop Rock, la solución definitiva para indicar la posición de las islas Scilly a los barcos. Pero si hablamos de islas pequeñas, también tenemos que tener en cuenta el país-isla más pequeño, la República de Nauru. Perteneciente a la Micronesia con 10.000 habitantes y 21 km² de superficie, este atolón rodeado de coral es rico en fosfato. Y en tranquilidad.

LECTURA EN PEQUEÑAS DOSIS

Existe una iniciativa muy inteligente, práctica y además, 'cuqui'. Little Free Library nace buscando que el libro se acerque a ti y no tú a él. Para ello, nada mejor que instalar pequeñas microbibliotecas a lo largo y ancho de Estados Unidos (y, actualmente, del mundo). Quien no lee es porque no quiere.

ESPAÑA MINI

¿Cuál diríais que es la playa más pequeña de España? Entre subidas y bajadas de mareas y arenales que crecen y decrecen a su antojo, nos quedamos con Gulpiyuri, en Naves, esa que dicen que es “la más pequeña del mundo” (pero sin título oficial). Declarada Monumento Natural en 2001 y con un acceso restringido a caminantes, esta playa está situada tierra adentro (a unos 100 metros de la costa) donde llega el agua del mar por una cavidad en la roca que funciona de pared.

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¿Y si queremos descansar en el pueblo más pequeño? En el Mapa de la pequeña España te sorprenderá encontrar lugares cuyo nombre tiene más letras que habitantes. Es el caso de Illán de Vacas, Toledo, considerado el pueblo con menos habitantes del país (actualmente, tres censados según el INE). Pero en superficie, ese pueblín que recorrer de arriba a abajo sin esfuerzo, es Emperador, en Valencia, con sus 0,0306 km² y sus diez calles.

EL HOTEL MÁS PEQUEÑO DEL MUNDO

Muchos consideran que el hotel más pequeño del mundo es el Central & Café de Copenhague, con una sola habitación. Otros siguen pensando que lo sigue siendo el Eh'haeusl, ubicado en la ciudad alemana de Amberg. Pero nosotros, amantes de lo nuestro y de presumir con descaro cuando hace falta, nunca dejaremos de aplicar este récord al hotel Punta Grande, en El Hierro. Primero, porque (lo) queremos y, segundo, porque sus cuatro habitaciones no podían ser más especiales: todas miran de frente al océano Atlántico y han sido construidas en piedra de lava.

SANTUARIO PEQUEÑO, FE INMENSA

Según el libro Guinness de los récords, la iglesia del Castillo de Colomares, ubicado en Benalmádena, es la más pequeña del mundo. No alcanza los dos metros cuadrados de superficie, pero a quién le importa el tamaño del santuario cuando la fe es inmensa. Construido en honor a Cristóbal Colón y al descubrimiento de América, el ‘castillo’ en realidad no es una fortaleza medieval en el sentido tradicional, sino más bien una obra arquitectónica singular que combina varios estilos, como el neogótico, el neorrománico y el neomudéjar, lo que le da un aspecto impresionante y pintoresco.

UN MUSEO DE UN PALMO

En este museo, aunque quieras, no podrías pagar entrada. Porque no la hay. El museo más pequeño del mundo se encuentra en Somerville, Massachusetts: The Mµseum (también conocido como The Tiny Museum) es accesible a cualquiera, como una pequeña ventana de 40 centímetros de arte en plena calle, en esta extraña dirección HarryPotteriana que es el número 72½ de Union Square. Como ellos mismos dicen, “un lugar pequeño con grandes ideas”.

POCAS AGUAS

En una lección básica de Geografía se aprende que el océano más pequeño del mundo es el Ártico que, para que nos hagamos una idea, es unas diez veces más pequeño que el océano Pacífico. Con respecto a las arterias del planeta, los ríos, nos encontramos ante una dificultosa medida. Pero se ha llegado a un acuerdo: el río que se lleva la palma por pequeño es el Roe, de 61 metros situado entre el Missouri y las cataratas del Parque Estatal de Giant Springs, en Montana.

DORMIR CHIQUITITO

Dormir en una cápsula es una actividad no apta para claustrofóbicos. Hay dos tipos de micro-hotel, aquellos rodeados de naturaleza salvaje (lo que ayuda al salir de tu colchón) y los hechos para ahorrar espacio (respira profundamente y no lo pienses). El primer caso es el de Das ParkHotel, muy cerca del Danubio en Alemania, que sigue la filosofía de la reutilización y la naturaleza. En estas tuberías industriales tienes todas las comodidades para dormir y, aunque el espacio no es una de ellas, al salir la recompensa la tienes al encontrarte en medio de la naturaleza, una suerte de glamping industrial. Lo que ocurre en Asia es otra filosofía: la naturaleza es secundaria en los hoteles-cápsula y lo que prima es el espacio low-cost. ¿Te atreves a dormir en alguno de ellos?

CENA INTIMÍSIMA

La cena más romántica es la que haces en tu casa... O en este restaurante de dos plazas. Solo Per Due (solo para dos) es el recopetín de lo íntimo, situado en una antigua villa romana, en un edificio del siglo XIX en Vacone (a una hora de Roma). ¿El menú? Depende del producto de temporada. ¿El vino? De las mejores bodegas italianas de la zona.

NATURALEZA EN PEQUEÑAS DOSIS

Si padeces de agorafobia, aléjate de los desiertos. Salvo de este: el desierto de Carcross, situado en el Yucón, tiene una extensión de 3 km² y se considera el desierto más pequeño del mundo, árido sí, pero abarcable. Esta pequeña sucesión de dunas se creó debido a las corrientes de viento en una zona fría, al sur del Círculo Polar, lo que le convierte en un microclima, casi microcosmos, en Canadá.

Es curiosa la historia del volcán más pequeño del mundo (uno que, además, es de los más activos). Hoy sabemos que se trata del volcán Taal, situado en Tagaytay, Filipinas, con un cráter de unos 400 metros de alto y que resulta ser una de esas maravillas extrañas: un cráter en una isla dentro de un lago. Pero en esto de los microdestinos nos falta algo: ¿Cuál es el conjunto natural más pequeño, el Parque Nacional más pequeño del mundo? El Parque de Penang se encuentra en Malasia y se gana el título con sus orgullosísimas 2.500 hectáreas. Monos, lemures, murciélagos, ardillas... más de 140 especies animales y 400 vegetales conviven en esta pequeña gran superficie verde.

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